"Dónde están los hombres?"
Dónde?
Dónde están? Dónde están los hombres con ideales claros y definidos, que yo
quiero unirme a ellos…
Dónde
están?
Sólo en las
películas? Sólo en la historia?
Esos
hombres con ideales, valores y conducta elevada, santa, inspiradora, noble,…
están desparramados por el mundo? Trabajan en silencio? Son anónimos? Se
buscan? Se reconocen?
Será que
sólo una vez que uno de ellos muere, y pasados los años alguien lo rescata del
vertiginoso olvido, es que empiezan a destacarse de entre el resto? Es así?
Impaciente,
me pregunto dónde estan, quisiera unirme a ellos, por Dios.
Dónde está
la huella por donde andan esos seres cuya conducta ética deja un rastro sin
recovecos, pasadizos o atajos, con claridad en sus decisiones y que no buscan
ser, pero son, un ejemplo a seguir?
Hombres que
no conocen la especulación y la doble lista de principios; hombres que no
conocen de conveniencia circunstancial, acomodaticia a los vientos que soplan.
Será o no
posible concretar ese “reino de la conciencia o nada”, que guía a Balian, en su
Cruzada?
Se pueden
tener valores mientras no sean sometidos a prueba? Se los puede sostener como
guía para toda decisión de la vida, altos, incólumes, fuera de toda
negociación?
Dónde están
esos hombres para los cuales no todo pasa por la bonanza económica, las luces
de la fama, el poder del altar social, el entretenimiento y la apariencia de la
cáscara?
Dónde, por
favor, dónde,… los hombres sin miedo, los que van en busca del futuro con
generosidad, hambrientos de saber para qué estamos aquí?
Ah!, si, en
algun lugar han de estar,… Seres de cuya conducta no se dude, no se tema, y se
perciba de ellos la atractiva y limpia intención del bienhacer… Inspiración de
verdad, de todo lo sano, de todo lo vivo… esa vida que crepita y quema desde la
intensidad de las pupilas inquietas.
Seres de
conducta noble pero no carente de errores, que no los imagino dioses. Pero, eso
si, errores sin dolo, errores limpios. No los busco perfectos, sino con la
capacidad humilde de corregirse, de saberse en formación, en lucha, preparados
para las pruebas y los golpes.
Andarán por
ahí, esos hombres que busco? Estarán disfrazados de bomberos, de médicos, de
científicos, de comerciantes, de empresarios, de jubilados, de estudiantes, de
todos un poco y un poco de todos?
Pero claro,
si estos hombres que busco son como los busco, no han de andar por allí
clamando sus proezas, sus hazañas, exhibiendo sus medallas… Es difícil
encontrarlos, su lugar no son las vidrieras.
Lo que sí
sé, es que los desengaños, las luchas, los problemas son constantes y nos ponen a prueba. Si logro pasarlos y aprender de
ellos, entenderlos y aceptarlos, entonces estoy seguro que un día este anhelo
me lleve al lado de los hombres que busco, y pueda asi marchar en sus filas,
igual que en las películas…
German
Raffetti Bourgaud
me gusto el espartano
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